lunes

Encontremos la fe

A bordo del Simmonds,con destino a Savannah,john y su hermano Charles fueron testigos de un extraordinario evento.Un grupo de viajeros alemanes moravos cautivó la atención de John durante una tempestuosa tormenta que fácilmente pudo haber culminado en un desastre.Mientras la fuerza del vendaval echaban al barco sin misericordia entre las olas destructoras,los moravos permanecían tranquilos y en paz.¡Incluso comenzaron a cantar!
El temor que sentía John en su corazón le hacía imposible entender cómo alguien podía permanecer calmado ante una muerte tan cierta.Su curiosidad surgió como una tempestad paralela-
Acercándose a uno de los alemanes,John le preguntó:"¿Está usted temeroso?"El hombre espontáneamente le respondió:"gracias a Dios,no".Confundido,John le hace otra pregunta.¿Y,sus mujeres e hijos,no tienen miedo?Otra vez aquel hombre le confirma:"nuestras mujeres e hijos,no tienen miedo a morir"-
Más tarde esa noche,Wesley trató de descansar,pero no podía quitar las imágines aterradoras de la tempestad.
"Mientras los ingleses abordo perdían todo control,los alemanes mantuvieron su compostura y entera resignación hacia Dios",escribio en su diario.Al recordar las palabras de aquel joven moravo,su corazón fue impactado con convicción.Los alemanes obviamente conocían una fe más allá de la suya propia.
Intrigado con la noción de una fe libre del temor,John deseaba aprender más de sus compañeros de viaje.Durante su estadía en las colonias,él les visitó a menudo y tradujo algunos de sus inspiradores himnos al inglés.¡Sin tan sólo su viaje misionero hubiera sido exitoso!
John regreso a Inglaterra descorazonado.Sus pensamientos vagaban a menudo acerca de las simples convicciones de los moravos.Él anheló entender su inconmovible fe y comenzó a cuestionar su propia relación con Dios,el comienzo de su vulnerabilidad es evidente en el principio de su diario:
"Fui a América a convertir a los indios;pero¡Oh!¿Quién me convertirá a mi?Yo tenía una religión muy superficial.Podía desenvolverme bien;sí,y creer en mí mismo mientras el peligro está lejos,pero la muerte me miró a los ojos,y mi espíritu se alborotó.Y no pude decir que,"la muerte es ganancia"...yo muestro mi fe por mis obras al confiar totalmente en ellas...¡Oh!¿Quién me librará de este temor a la muerte?"
Diario-24 de enero de 1738.
diario de John Wesley

1 comentario:

Anónimo dijo...

Maravilloso es el testimonio de Juan Wesley, fundador del Metodismo, donde nuestra iglesia tiene sus raíces. Spurgeon lo llamó "El Príncipe Moderno de los Arminianos". Sin embargo se encontró con esta fe más allá de la suya propia, que lo hizo recapacitar respecto de su relación con Cristo... sólo entonces él y su hermano Carlos pudieron creer en que en medio de las tempestades podían huir... "a tu seno protector, fiándome de tu bondad"(Himno Nº 20 "Cariñoso Salvador", de Carlos Wesley), y confiar completamente en la Gracia de Dios.
Dios le bendiga.